Siempre se ha dicho que una casa vacía se deteriora con más rapidez que una casa habitada. Cuando una casa pasa mucho tiempo cerrada y sin ventilar, pueden aparecer problemas de humedades, manchas en las paredes, cortinas y ropa que pierde calidad en sus tejidos al no airearse y pasar largos periodos de tiempo a oscuras o tuberías que pueden atascarse o deteriorarse por falta de uso. Por eso, desde Provaiser queremos ofrecerte algunos consejos para evitar el deterioro de una casa vacía.
Consejos para evitar que una casa vacía se estropee
1. Vaciar las tuberías
Mantener en buen estado una casa vacía implica vigilar los suministros básicos como el agua. Lo primero es cerrar la llave de paso principal, esto evitará el flujo de agua o una filtración si una tubería sufre daños. Posteriormente, debemos purgar el agua de las tuberías internas de la vivienda. Gracias a ello evitaremos que se estanque y aparezcan todo tipo de organismos. Si podemos visitar la vivienda cada cierto tiempo debemos hacer correr el agua para limpiar el sistema de sedimentos e hidratar las gomas y juntas. Recuerda que puedes optar por instalar un aislamiento térmico sobre las tuberías para mejorar su eficiencia energética.
2. Limpiar los desagües
Las canaletas y desagües de patios o terrazas deben quedar limpios para evitar la acumulación o desbordamiento del agua. Esto puede derivar en problemas más graves como filtraciones o, en zonas muy frías, la formación de placas de hielo. Limpiar las canaletas en una vivienda deshabitada es especialmente importante antes de la llegada del invierno para asegurar su correcto funcionamiento.
3. Limpieza interior en profundidad
No debemos descuidar tampoco la limpieza interior de la vivienda que va a quedar vacía. Es imprescindible eliminar cualquier resto de comida o suciedad para evitar la entrada de hormigas u otra clase de insectos. Tapicerías y alfombras bien limpias evitarán la proliferación de ácaros. Y antes de cerrar definitivamente la vivienda debemos asegurarnos de que todo está seco, para evitar la humedad y evitar el deterioro de una casa vacía.
4. Medidas de precaución en los puntos de acceso
Los puntos de acceso, como las puertas o zonas de ventilación, son la entrada para los insectos. Incluir alguna medida de prevención extra no está de más. Podemos rociar la zona con insecticidas o emplear un repelente sólido para proteger la vivienda. También puedes optar por instalar puertas de mejor calidad para evitar la entrada de frío, humedad o calor desde el exterior.
5. Protección frente al sol
Otro de los grandes enemigos de las casas vacías son los rayos solares, sobre todo, en los espacios orientados al sur. Los rayos del sol atacan las diferentes superficies como muebles o suelos por lo que debemos contar con medidas de protección (cortinas, estores o persianas). Un sistema domótico puede ayudará a regular estos elementos para que la vivienda no tenga aspecto de vacía.
6. Preservar la ropa
En caso de dejar en la casa ropa, colchones u otro tipo de textiles es importante incorporar ciertas medidas para evitar la aparición de polillas y ácaros. Podemos optar por almacenar este tipo de elementos al vacío, en bolsas, o usar bolas antipolillas para proteger todos los tejidos. Los colchones son uno de los puntos más críticos; forrarlos con plástico suele ser la mejor solución.
7. Ventilar las estancias
Aunque la casa esté cerrada, es importante que cuente con cierta ventilación para evitar la condensación en caso de contraste de temperatura entre exterior e interior. Los respiradores de la vivienda deben estar limpios y permitir la circulación del aire. En determinados casos se puede contar con un sistema de ventilación por presión positiva que ayude a reciclar el aire del interior y así evitar el deterioro de una casa vacía.
8. Desenchufar los aparatos eléctricos
Otro de los suministros que debemos vigilar es el eléctrico. Es recomendable desenchufar todos los aparatos electrónicos y asegurarnos de que no quede ninguna luz encendida. En caso de no necesitar corriente para ningún elemento de la vivienda es recomendable bajar los fusibles para evitar daños en caso de una subida de tensión en la red.
9. Hacer una revisión exterior
Antes de dejar la casa podemos realizar una inspección exterior. Vigilar paredes y tejados para asegurarnos de que están en buen estado puede evitarnos más de un susto. Cualquier pequeña grieta o daño puede derivar en una filtración peligrosa. Si crees que la cubierta del edificio no se encuentra en buen estado, recuerda que puedes optar por impermeabilizar el tejado para evitar la filtración de agua al interior.
10. Implantar medidas de seguridad
Una casa vacía es susceptible de ser allanada, por lo que debemos contar con elementos de seguridad. Alarmas o sistemas de domótica que simulan presencia pueden ser una gran ayuda para evitar estos problemas.
Ahora que tienes todos estos trucos para evitar el deterioro de una casa vacía, no dudes en ponerlo en práctica para evitar que tu casa pueda estropearse.
