Un restaurante es un lugar complejo. Para los clientes, debe ser un sitio cómodo y agradable al que ir a compartir buenos momentos con familiares y amigos. Para los trabajadores debe ser un lugar de trabajo seguro en el que las instalaciones faciliten su tarea todo lo posible. En ambos casos, el local debe estar perfectamente acondicionado para ofrecer siempre una experiencia memorable y, es ahí donde entran en juego los aislamientos térmicos para restaurantes.
Elegir un buen aislamiento térmico para restaurantes es un proceso que no siempre resulta sencillo. Hay que tener en cuenta materiales, características, presupuestos y otros muchos detalles para elegir el que se adapte mejor a las necesidades del local. Por ello, comentamos aquí todas las claves al respecto y cómo seleccionar la mejor alternativa.
Aislamientos para restaurantes: factores a tener en cuenta
A la hora de comentar cómo encontrar el aislamiento térmico para un restaurante no vamos a centrarnos tanto en el material (normalmente, celulosa o lana de roca/vidrio) como en la verdadera utilidad de cada tipo de aislamiento dependiendo de la estancia correspondiente. Para conseguir más información sobre cada material, tienes a tu disposición decenas de artículos en nuestro blog en los que hablamos de ese tema.
La cocina
En este caso, el objetivo es evitar que el calor pase al comedor y también su concentración excesiva para facilitarles el trabajo a los profesionales. La idea es conseguir que pueda mantenerse una temperatura estable durante todo el año evitando altibajos. El refuerzo del aislamiento en todas las paredes nos permitirá que pueda trabajarse de forma correcta sin acusar la temperatura exterior.
No debemos olvidar el empleo de materiales de aislamiento acústico. La meta final debe ser que los clientes no oigan continuamente el sonido de los electrodomésticos, los cubiertos, los cajones y demás elementos. Cuanto más se reduzca, más opciones habrá de lograr que su experiencia sea más agradable.
También hay que tener en cuenta que la cocina es el principal foco de incendios en el negocio, por lo que un buen material aislante también dispondrá de propiedades ignífugas que contribuirán a detener o ralentizar el avance del fuego.
El comedor
En conexión directa con la idea anterior, cualquier cliente quiere comer a gusto, sin molestias y sin alteraciones de la temperatura. Bien sea en invierno o en verano, el salón interior de un restaurante ha de estar adaptado previamente para evitar que el frío o el calor no terminen por provocar que los clientes prefieran no ir a un local concreto. En este sentido, tenemos que tener en cuenta tres conceptos:
El aislamiento térmico correcto permite que el aire acondicionado sea más eficaz. Así, se reduce la factura de la luz y se puede crear un microclima con una temperatura más agradable. Además, se reducen las emisiones de gases contaminantes y se contribuye a disponer de una instalación más sostenible.
El aislamiento acústico complementa al anterior e impide que el ruido salga al exterior y viceversa. Evitar las estridencias siempre es positivo para que la clientela considere el local como ideal para volver a comer en un futuro próximo.
La altura del comedor es un factor esencial para evitar que la reverberación de la voz provoque ruidos demasiado molestos. Para ello, el aislamiento de las paredes deberá ir en consonancia con el del techo consiguiendo así espacios donde conversar sea más sencillo al equilibrarse de manera natural el nivel de ruido existente en la sala. Sin duda, uno de los puntos clave cuando hablamos de aislamientos térmicos para restaurantes.
La fachada
Suele ser la gran olvidada, pero su importancia es enorme para equilibrar la temperatura de la parte principal del local. Independientemente del empleo de materiales de diseño como el vidrio, siempre tenemos opciones para reforzar el aislamiento en áreas específicas de la fachada. La combinación de elementos es una base ideal para construir un espacio aislado de forma más adecuada y acertada. Es importante trabajar bien en el aislamiento de esta zona, ya que es donde tienen lugar la mayor parte de los puentes térmicos que conectan con el exterior.
Una instalación a medida y personalizada
Si bien hay ecuaciones de gran ayuda, como la de Sabine, para determinar la reverberación del sonido, no siempre hay que aplicar el mismo tipo de medidas para todos los restaurantes. Lo más conveniente es realizar un estudio personalizado de cada local y de la extensión de cada una de las áreas arriba comentadas.
La correcta combinación de distintos materiales dará como resultado un material distinto en cada parte del negocio. Solo así es posible conseguir que los aislamientos térmicos para restaurantes en Valencia conviertan un mero local en un establecimiento que se adapte a las necesidades reales de sus clientes finales. Recomendamos apostar por esta opción para contar con las ventajas explicadas y, sobre todo, para convertir cualquier restaurante en un lugar mejor adecuado a las necesidades reales de trabajadores y clientes.
